MÙSICA

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Osho: Ser Simplemente Un Testigo



Ser Simplemente Un Testigo

Esto es una técnica corporal. Buda utiliza la respiración; los taoístas usan el hara. A este centro del ombligo lo llaman hara.
Uno lo destapa, lo descubre, a través de su testimonio. Lo bási­co, lo esencial, es atestiguar. Se puede usar con muchísimas técnicas.
En la tradición china taoísta tienen un método que se cono­ce como tai-chi. Es un método de centramiento, un método para atestiguar. Dicen haz lo que quieras pero mantente consciente del centro del ombligo. Al andar, sé consciente del centro del ombli­go. Al comer, sé consciente del centro del ombligo. Al luchar, sé consciente del centro del ombligo. Haciendo lo que estés hacien­do, sé consciente del centro del ombligo. Y de nuevo, si eres cons­ciente del ombligo, no puedes pensar. En cuanto empiezas a pen­sar, no podrás seguir siendo consciente del ombligo.
Pero la mente se puede cambiar. El tantra dice que hay sie­te centros y la mente puede pasar a cualquier centro. Cada cen­tro tiene una función diferente. Si te concentras en un centro determinado, te conviertes en un hombre distinto.
En Japón había una agrupación militar, igual que los ksha­triyas en India, que reciben el nombre de samuráis. Están adies­trados para ser soldados, y su primer adiestramiento consiste en llevar la mente cinco centímetros por debajo del ombligo. En Ja­pón este centro recibe el nombre de hara. Los samuráis son adies­trados para llevar la mente hara. A menos que un soldado sea ca­paz de llevar su mente y enfocada en el hara, no se le permitirá luchar, y esto está bien. Los samuráis son los mejores luchadores que ha habido sobre la tierra, los mejores guerreros; en el mun­do no hay nada comparable con un samuray. Es un hombre dis­tinto, un ser distinto, porque su enfoque es diferente.
Dicen que cuando estás luchando el tiempo no existe. La mente necesita el tiempo para funcionar; la mente calcula. Si te atacan y tu mente piensa en cómo planear, habrás fallado, habrás perdido. No hay tiempo. Debes actuar sin tiempo, y la mente no puede funcionar sin tiempo, necesita tiempo. Por corto que sea, pero necesita tiempo.
Debajo del ombligo hay un centro, el hara, que funciona atemporalmente. Si el luchador está enfocado en el hara mien­tras lucha, su lucha será intuitiva, no intelectual. Antes de que le ataquen, él ya lo sabe. Es una sensación sutil en el hara, no en la cabeza. No es una interferencia, es telepatía psíquica. Antes de que tú le ataques, antes de que pienses en atacarle, él ya ha re­cibido este pensamiento. Esto golpea su hara y él está prepara­do para protegerse. Incluso antes de que ataques, ya está a la de­fensiva, ya se ha protegido...
Osho- El Libro del Hara
Cap. 10 Técnicas de Meditación
Págs. 232,233

No hay comentarios:

Publicar un comentario